Inbound Marketing, Marketing de contenidos, Linkbaiting… No dejan de aparecer extraños términos mercadotécnicos de todo tipo, pero en mi opinión siempre nos estamos refiriendo a lo mismo: el bueno y viejo “el contenido es el rey, hay que crear buenos contenidos para que nos enlacen y compartan”. Así pues, en este artículo vamos a simplificar un poco todo este panorama terminológico, que en realidad es muy sencillo de entender. Aportaremos también algunas claves de interés, para bloggers y anunciantes.
El Marketing online está viviendo una auténtica Edad de Oro, de eso no hay ninguna duda. Los jóvenes llamados millennials (también conocidos como Generación Y o “generación del Milenio”), responden cada vez menos a la publicidad en los medios convencionales (prensa, TV y radio), siendo el entorno digital el mejor canal de comunicación para llegar a ellos. No debe extrañar, pues son precisamente nativos digitales, nacidos y criados a la par que el propio Internet. Lo usan de forma cotidiana para todo en su vida: relaciones sociales, compras… Así pues para ofrecerles productos o servicios hay que estar allí.
Pero no están solo los millennials, pues cada vez más personas usan Internet para sus compras, y es obvio que la tendencia va en aumento. Las marcas y compañías se han dado cuenta de esto, por supuesto, y dedican cada vez más esfuerzos al Marketing online. Por el lado teórico, esto genera todo tipo de términos y conceptos, como los ya citados Inbound Marketing, Marketing de contenidos, etc. De los últimos que he visto es el término Linkbaiting.
¿Qué es el Linkbaiting? Se define como “cualquier sistema dedicado a que nos enlacen desde otros sitios para mejorar nuestro posicionamiento y relevancia”. Así pues, es lo mismo que el Linkbuilding de toda la vida, con el matiz de que dichos enlaces han de ser exclusivamente naturales. Esto es, que las personas nos enlacen por voluntad propia, debido a lo bueno que es nuestro contenido. No en vano, “Link Bait” se traduce como “cebo de enlaces”.
¿Dónde deja esto a la vieja técnica de linkbuilding tradicional consistente en la compra de post patrocinados? En mi opinión, en el mismo lugar de siempre. Y no solo en mi opinión, pues si no no existirían las muchísimas empresas que hay dedicadas precisamente a eso, a poner en contacto a anunciantes con bloggers, youtubers e influencers en general (personas con muchos seguidores en cualquier red social). Dicho sector está funcionando a toda máquina, y cada día surgen de hecho nuevas compañías (enlace anterior para ver las principales en español). Esto habla sin ninguna duda de que este nuevo término de Linkbaiting no es otra cosa, en definitiva, que Linkbuilding. Lo de siempre. Sólo que bien hecho, claro.
¿A qué me refiero con “bien hecho”? Fácil: a actuar siempre honestamente. En el caso de los post patrocinados, jamás se debe contratar a un blogger o influencer para que hable de nosotros diciendo cosas que no sean ciertas. Es más, el asunto debe tratar de todo lo contrario: dicha persona deberá crear un contenido de calidad, verdadero y objetivo, que aporte información, y sobre todo sea útil para las personas interesadas en ese tipo de productos o servicios. Sencillamente, como anunciantes utilizaremos el canal de esa persona para informar sobre nuestro producto.
Actuando así todos ganan: el anunciante obtiene visibilidad, y el público información relevante en relación con un tema que le interesa. Una información que les ayudará en su decisión de compra. El blogger es un mero informador, que debe actuar objetivamente (si sabe lo que le conviene). Destacando los puntos fuertes del producto, claro está, pero de forma veraz. Si se hace de esta forma el público reconocerá la credibilidad de la información, y la compartirá en sus propias redes, generando infinidad de enlaces hacia nosotros. Esto es Linkbaiting. Por tanto no hay por qué dejarlo todo «al azar». Podemos ayudar contando con la ayuda de canales especializados.
Eso sí, en caso de no actuar honestamente, desde luego el resultado será justo el contrario: un completo desastre. Todos perderán credibilidad, producto y blogger. La credibilidad es el activo más importante de cualquier medio (o profesional) de la comunicación, de forma que hay que cuidarla como un tesoro. Si nos proponen hacer algo que implique el más mínimo engaño (o sencillamente faltar a la verdad), rechazar el trabajo inmediatamente; ese directivo o compañía que ofrece el trabajo no sabe lo que hace. Poner tierra de por medio entre ellos y nosotros.
Además, hace ya mucho tiempo que ha quedado claro que las prácticas deshonestas de linkbuilding (intercambios masivos de enlaces entre webmasters y “chiringuitos” parecidos) no sirven para nada, y de hecho están penalizadas por los buscadores. Ya hablé extensamente sobre ello en el artículo “¿Se acabaron los intercambios de enlaces?”. Recomiendo su consulta, recojo allí un vídeo que el propio Matt Cutts (jefazo por entonces de Google) realizó sobre este tema en el año 2014.
No queda ninguna duda, lo único que funciona es la creación de contenidos que sean de verdad útiles para el público, que les resuelvan dudas o problemas. Y así es como han surgido esos extraños términos como el Inbound Marketing o “Mercadotecnia de atracción” (atraer a potenciales clientes ofreciéndoles información de su interés relacionada con el producto) y el Marketing de contenidos, que viene a ser lo mismo: crear contenidos de calidad para atraer de forma natural (en su definición técnica se entiende como parte del Inbound Marketing). Para mí esto es estar hablando todo el tiempo de la misma idea básica. ¿O no?
Resumiendo, comprar post patrocinados es una forma más –y correcta- de linkbaiting y Marketing de contenidos. Podemos crear vídeos y artículos en nuestro propio blog corporativo, por supuesto, pero también podemos ampliar más el alcance contratando buenos artículos y menciones por parte de editores de calidad de nuestro sector. Y subrayo “editores de calidad”, pues esto es clave. Todos los implicados (anunciantes y editores) deben estar igualmente preocupados por la calidad de la información dada, pues si ésta es mala –y sobre todo si ésta es falsa-, todos ellos saldrán perjudicados. El producto del que se habla y el medio que la difundió. Por el contrario, si la información es buena todo será positivo: el público nos recompensará, y eso a su vez hará que los buscadores nos recompensen también.
Está en nuestras manos, podemos elegir entrar en un círculo virtuoso, o por el contrario caer en el lado oscuro. Es responsabilidad de anunciantes pero también de los bloggers e influencers. Por mi parte, recomiendo sin duda la contratación de post patrocinados, pero que se haga con editores de confianza, personas con larga trayectoria, que no pondrán en riesgo la credibilidad de sus canales. Y por supuesto revisar después la información publicada, de todas formas.
En cuanto a mis compañeros y compañeras bloggers, sean del tipo que sean, les recomiendo mucho que actúen siempre con objetividad y de forma sincera. Redundará en su propio beneficio. Es aconsejable también hablar solo de cosas relacionadas con nuestra temática. Si nos piden formar parte de algo que parezca deshonesto, rechazar inmediatamente el trabajo y alejarse de allí a toda velocidad.
Otras buenas prácticas que podemos seguir como bloggers (ya seamos creadores de vídeos, artículos… cualquier tipo de canal), es la de avisar a nuestro público de que esa información está siendo patrocinada. No es algo imprescindible si estamos hablando de algo en lo que de verdad creemos, y de hecho los grandes medios de comunicación (televisión, etc) lo hacen continuamente -colocan piezas informativas pagadas sin avisar de ninguna forma-. En caso de que el anunciante quiera poner cosas que nosotros no queramos decir, porque nos parezcan exageradas por ejemplo, o porque quiera que se digan cosas literales de su cosecha, lo más recomendable es colocar algún tipo de cartel o aviso de «post patrocinado», para informar de dicha circunstancia a la audiencia, y que lo pueda tener en cuenta. Poner links no follow también es recomendable en dichos casos (añadir el atributo rel="nofollow"
a la etiqueta a
del link, para indicar al buscador que no queremos transmitir nuestro «apoyo» a ese destino).
Si, por el contrario, el contenido del post patrocinado es como debe ser, esto es, todo él verídico, útil e informativo, no hace falta nada de esto, pues en realidad no diferirá de cualquier otro post que hagamos. Sencillamente habremos sido contratados para hablar de algo en particular, y precisamente por nuestra profesionalidad, objetividad y público. Esto debería quedar muy claro para todos, anunciantes y editores (sobre todo para los anunciantes, que muchos parece que no tienen ni idea de lo que hacen).
Por último, un poco de información práctica también: recomendaré algunas buenas plataformas donde anunciantes y bloggers pueden encontrarse (están todas probadas por mí personalmente). Las he reunido en el artículo que enlacé al principio: “Nuevas plataformas para complementar AdWords/AdSense”. Allí se detallan un buen puñado de sitios web dedicados a esto, donde al apuntarnos nos podrán contratar post patrocinados, menciones en redes sociales y muchas cosas más (además están todas en español). Como digo en dicho artículo, sería una tontería no usar estos equipos de personas, que nos harán de comerciales en un claro “todos-ganamos”. Ya que están, usémoslos.